Nombre: Sofía Hernández.
Edad: 21 años.
País: Costa Rica.
Campos de acción ODS:
ODS 1: Fin de la Pobreza.
ODS 4: Educación de Calidad.
ODS 5: Igualdad de Género.
ODS 10: Reducción de las Desigualdades.
ODS 13: Acción por el Clima.
ODS 16: Paz, Justicia e Instituciones Sólidas.
ODS 17: Alianzas para lograr los Objetivos.
Mini Bio:
Mi nombre es Sofía Hernández, tengo 21 años, soy estudiante de quinto año de la carrera de Ciencias Políticas y actualmente me encuentro haciendo la tesis de grado acerca la relación entre la inseguridad alimentaria y migración climática en el Corredor Seco Centroamericano, desde la perspectiva de género (Específicamente en la zona correspondiente de Costa Rica)
En la Universidad, Universidad de Costa Rica, estoy en la Comisión Ambiental y formo parte de una colectiva feminista: Me Pasó en la UCR, además que me encuentro haciendo voluntariado con población migrante y refugiada con la ONG CENDEROS.
En el mundo del activismo climático, como tal, llevo menos de un año cuando me uní a Fridays For Future Costa Rica, participé en la primera Local Conference of Youth en mi país y fui seleccionada como delegada joven de Costa Rica para la PreCOP y COP25, donde apoyé en temas de migración y refugio climático, en específico con el Task Force on Displacement del Mecanismo Internacional de Varsovia, juventudes y el plan de acción de género. Actualmente soy parte de otras Organizaciones como la Red de Juventudes y Cambio Climático,Earth Uprising, Polluters Out y coordinadora de la campaña We The Planet.
Mi sueño:
Sin ser muy idealista, sueño con un mundo sostenible, donde los Estados y la Comunidad Internacional cumplan su labor en garantizar los Derechos Humanos, sueño con un mundo con igualdad de género, con personas y comunidades con las herramientas necesarias para que puedan potencializar su capacidad de resiliencia ante el cambio climático, un mundo donde las migraciones siempre sean el último recurso y cuando se den se garanticen sus derechos fundamentales y sueño con gobiernos e instituciones más transparentes que respeten el Estado de Derecho y la Soberanía de los Pueblos a favor del bien común.
Un mundo donde cada voz es escuchada y legitimada por igual, sin exclusión alguna.
Sin idealismos, sin utopías, no hay esperanza y algo por lo que se debe luchar.